La auditoría como análisis crítico y sistemático de cualquier herramienta de procesos, es imprescindible a la hora de implementar mejoras. Como diría Emilio Duró, “debemos quitar lo viejo para implantar lo nuevo” y por lo tanto, no hay mejor forma de ver que esta pasando, que una auditoría para detectar donde está esa parte obsoleta y desfasada que nos impide adaptarnos a los cambios del mercado.
El objetivo de una auditoría para la Web , consiste sobre todo en dar a conocer el estado de una determinada página a través de una verificación de parámetros. Dando como resultado una serie de reportes que ayudarán al Webmaster o al encargado de la parte de Marketing Online, a comprender varias áreas del sitio, como se está llevando a cabo y si hay fórmulas que las puedan mejorar.
Debemos entender que una pagina web no es para toda la vida, y debe de tener sus momentos de mejora, adaptación y supervisión. En cuando a los contenidos de una web, nunca debería permanecer estática, es decir, lo ideal es que siempre tenga elementos nuevos, como contenido fresco en un Blog o nuevos productos y/o servicios. Las webs son puntas de lanza en nuestra estrategia comercial, y el más mínimo error puede generar grandes pérdidas, que pueden ser menos si hay una supervisión contante de lo que ahí está ocurriendo.
Sin más preámbulos vamos a determinar cuales son 10 sencillos pasos para determinar como funciona nuestra web y si es necesario desarrollar algún cambio:
Aunque en la mayoría de los casos, la decisión de una auditoría surge cuando ocurren problemas. Es recomendable implementar soluciones sin llegar a los extremos de que la web no funcione como deba, ya que ahí estamos perdiendo dinero, y si se trata de reserva directa, posiblemente de bastante.
Es tan importante la salud de nuestra web y su influencia en nuestra cuenta de resultados, que debemos desarrollar análisis y mejoras constantes, que nos lleven a no cometer errores y maximizar los resultados.